Inmobiliaria en el cine: Las casas más icónicas del séptimo arte

El cine y la televisión han dado lugar a algunos de los hogares más icónicos y memorables de todos los tiempos. En algunos casos, son casas reales que fueron llevadas a la pantalla, y en otros… el proceso fue al contrario! Fueron diseñadas para una película o serie de televisión, y sirvieron como fuente de inspiración para recrearlas en la vida real. Veamos algunos ejemplos:

Top Gun (1986)

Si cierras los ojos seguro que puedes recordar cuando Maverick (Tom Cruise) visita a Charly (Kelly McGillis) en su casa de la playa. Bien, pues esta casa es real y se encuentra en Oceanside, California, y recibe miles de visitas de fans que acuden para tomarse una instantánea.

El Señor de los Anillos

Hobbiton en Nueva Zelanda fue construida para la trilogía de "El Señor de los Anillos" y se ha convertido en una atracción turística popular. Los visitantes pueden explorar las casas y jardines de Hobbiton, así como disfrutar de una cerveza en el pub local, el Green Dragon Inn.

Psicosis (1960)

La casa de Norman Bates en "Psicosis" es una de las más icónicas de la historia del cine de terror. Situada en la cima de una colina, su arquitectura gótica y su ambiente tenebroso la convierten en un lugar siniestro e inquietante. Pero… hemos de decirte que no era real, por lo visto Alfred Hitchcock se inspiró en un cuadro de Edward Hopper: 'La casa junto a la vía del tren' y se construyó en los estudios Universal.

Blade Runner (1982)

Totalmente real, diseñada por Frank Lloyd Wright en Los Ángeles, no sólo ha sido el apartamento de Rick Deckard en Blade Runner. Su diseño que recuerda a la arquitectura maya también ha sido escenario de “House on Haunted Hill” (1959), “The Karate Kid III”, “Buffy caza vampiros”, e incluso ha sido dibujada en un capítulo de South Park.

El Gran Gatsby (2013)

Seguramente recuerdes la impresionante mansión de la película "El Gran Gatsby". Bien, pues se rumorea que la casa del personaje de Jay Gatsby en la película de 2013, fue construida en un terreno en la costa norte de Sydney, Australia y luego fue vendida por alrededor de 25 millones de dólares a un comprador anónimo.

Desde mansiones ostentosas hasta casas encantadas, estas viviendas ficticias o no, han dejado una huella en la gran pantalla y en la vida real.